¿Qué es un abogado penalista?


Abogado penalista

Un abogado penalista es un profesional que se encarga de los expedientes jurídicos que tienen su fundamento en el Derecho Penal, basándose en dos grandes normas:
  • El Código Penal (CP)
  • La Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim)

El abogado penalista se ocupa de las siguientes funciones que son inherentes a su formación:

  1. Asesoramiento: en una primera comunicación o contacto con el cliente, debe ponerla al tanto de cuál es su situación real e informarle acerca de lo que se la acusa. Allí se define cuál será su actuación. Se estudiará la viabilidad de la acusación y se pondrá de acuerdo para defender sus derechos, ya sea que se lo esté acusando de un delito o que sea la víctima. El asesoramiento se dará durante todo el proceso, porque seguramente la persona deberá tomar ciertas decisiones y se llevará adelante una estrategia.
  2. Acompañamiento: un primer encuentro puede ser también que deba acompañar al detenido para su primera declaración, o para orientarlo en sus opciones de declarar o guardar silencio.
  3. Reunión de pruebas y argumentos para la defensa del cliente: en esta etapa todos los datos, de todo tipo que puedan reunirse, incluso anteriores al hecho demandado, serán fundamentales. Deben ser pruebas legales y jurisprudenciales.
  4. Análisis de la cronología de los hechos: se hace un recorrido de todo lo acontecido, y de los momentos donde intervienen los testigos.
  5. Análisis de la defensa: así como se analiza todo lo que corresponde al defendido, también se debe estar muy atento a las pruebas y argumentos que presente la defensa, con el fin de contraponerse o argumentar contra ellos.
  6. Vigilancia y garantía de la invulnerabilidad de los derechos del acusado: tanto por parte de los integrantes del juzgado, como de las fuerzas de seguridad.
  7. Actualización de la información: durante todo el proceso legal el cliente debe estar informado de lo que ocurre.
  8. Negociación: en ciertos momentos el abogado tiene posibilidades de negociar en el mejor beneficio para la persona.
  9. Preparación de los alegatos de defensa: en el momento del juicio oral, el abogado debe estar muy preparado para hablar con fundamento y tener buenas argumentaciones. Debe organizar bien su defensa, para dar fundamentos a favor de su cliente, saber responder con capacidad ante las presiones de un juicio y beneficiar en todo lo posible a la persona.