¿Cómo es el funcionamiento de una Empresa de Trabajo Temporal?


¿Cómo es el funcionamiento de una Empresa de Trabajo Temporal?

Las Empresas de Trabajo Temporal (ETT) en España son entidades cuyo principal propósito es facilitar la contratación temporal de trabajadores por parte de empresas usuarias que necesitan cubrir sus necesidades de personal a corto plazo.

El funcionamiento de una ETT en España está regulado por la legislación laboral y requiere el cumplimiento de ciertos requisitos y procedimientos.

Aquí te explico los aspectos clave del funcionamiento de una ETT en España:

  1. Autorización y registro: Antes de operar como una ETT, la empresa debe obtener una autorización de la autoridad laboral competente y registrarse en el Registro de Empresas de Trabajo Temporal. Esta autorización se concede si la empresa cumple con los requisitos legales y financieros establecidos.
  2. Contratación de trabajadores temporales: Una vez autorizada, la ETT puede contratar trabajadores de manera temporal y luego cederlos a empresas usuarias para cubrir sus necesidades de personal. Los contratos temporales son la base de la operación de una ETT.
  3. Relación entre la ETT y las empresas usuarias: La ETT y las empresas usuarias establecen un acuerdo de cesión de trabajadores. La empresa usuaria informa a la ETT sobre sus necesidades de personal temporal y, si la ETT dispone de trabajadores con el perfil requerido, los cede a la empresa usuaria.
  4. Contrato de trabajo con los trabajadores temporales: La ETT firma contratos de trabajo con los trabajadores temporales que cederá a las empresas usuarias. Estos contratos son de carácter temporal y pueden ser de distintas modalidades (por ejemplo, contratos de obra o servicio determinado o contratos eventuales por circunstancias de la producción).
  5. Periodos de cesión: La cesión de trabajadores por parte de la ETT a las empresas usuarias tiene un límite de tiempo que varía según la modalidad de contrato. La Ley establece que la duración máxima de la cesión no puede exceder de 12 meses en un período de 18 meses, aunque puede haber excepciones.
  6. Salarios y beneficios: Los trabajadores temporales cedidos por la ETT deben recibir un salario y beneficios según lo establecido en el convenio colectivo aplicable a la empresa usuaria. La ETT es responsable de asegurarse de que se cumplan estos requisitos.
  7. Cumplimiento normativo: Las ETT deben cumplir con todas las regulaciones laborales vigentes, como las relacionadas con la seguridad social, el horario de trabajo, las vacaciones y otros derechos laborales de los trabajadores temporales.
  8. Fiscalidad: Las ETT están sujetas a ciertas obligaciones fiscales, incluyendo la retención y el pago de impuestos sobre la nómina de los trabajadores temporales y el cumplimiento de otras obligaciones fiscales.
  9. Inspecciones y sanciones: Las ETT están sujetas a inspecciones periódicas por parte de las autoridades laborales para asegurar su cumplimiento de la legislación laboral. El incumplimiento de las normativas puede resultar en sanciones.

El funcionamiento de una ETT en España es una actividad regulada y sujeta a requisitos legales estrictos. Si estás interesado en establecer o trabajar con una ETT, es fundamental contar con asesoramiento legal y conocer en detalle las leyes laborales y fiscales aplicables para cumplir con todas las obligaciones y responsabilidades. Además, es importante destacar que las ETT deben cumplir con los derechos laborales de los trabajadores temporales y garantizar que reciban un trato justo y adecuado.

Cuando una empresa requiere contratar personal para alguna posición temporal, solicita a la ETT con la cual ha establecido un contrato de servicios que realice la búsqueda del profesional idóneo. Para ello le ofrecerá el perfil y todos los requerimientos necesarios para llenar esa posición.

La ETT inicia entonces la búsqueda haciendo uso de sus bases de datos de profesionales, recurriendo a portales de empleo o a través de cualquier otro mecanismo de comunicación posible con el mercado de profesionales.

Lleva a cabo todo el proceso de entrevistas y pruebas de selección necesarias, así como los usuales chequeos de salud y seguridad. Una vez que se ha conseguido el candidato ideal para la posición, se le presenta a la empresa usuaria para su aprobación final. En algunas ocasiones, la ETT presentará una preselección de candidatos y la empresa usuaria tomará la decisión final.

Es la ETT también la encargada de hacerle al candidato la oferta laboral y es con ella con quien el nuevo trabajador firmará contrato de trabajo. La ETT le da el alta en la Seguridad Social, se encarga del pago de la nómina del trabajador, y de la gestión de todos los aspectos de su contratación.

El trabajador prestará sus servicios en la empresa usuaria, adaptándose a su horario y normas, y contando con un supervisor en esa organización.

Es decir, se produce una relación triangular entre la empresa usuaria, la ETT y el trabajador.