Tipos de apoderamiento apud acta existentes

1. Poder general: Este tipo de apoderamiento otorga al apoderado poderes amplios y generales para representar al poderdante en una amplia gama de asuntos legales y administrativos. Puede incluir la capacidad de realizar transacciones financieras, firmar contratos, administrar propiedades o tomar decisiones legales en nombre del poderdante.
2. Poder específico: En contraste con el poder general, un poder específico se limita a asuntos o propósitos particulares. Por ejemplo, puede otorgarse un poder específico para representar al poderdante en la venta de una propiedad específica o para realizar trámites administrativos relacionados con una empresa en particular.
3. Poder notarial: Un poder notarial es aquel que se otorga y se registra ante un notario público. Este tipo de apoderamiento apud acta se utiliza para brindar mayor autenticidad y validez legal a los poderes otorgados.
4. Poder para actos de administración: Este tipo de poder se utiliza para autorizar al apoderado a realizar actos de administración en nombre del poderdante. Los actos de administración suelen referirse a la gestión de bienes y asuntos financieros, como el cobro de rentas, el pago de facturas o la realización de inversiones.
5. Poder para pleitos y cobranzas: Este tipo de poder se utiliza cuando se necesita que el apoderado represente al poderdante en asuntos legales, judiciales o de cobranza. Permite al apoderado tomar acciones legales, presentar demandas, defender intereses y cobrar deudas en nombre del poderdante.

Estos son solo algunos ejemplos de los tipos de apoderamiento apud acta más comunes. Es importante tener en cuenta que las leyes y regulaciones relacionadas con los poderes pueden variar en diferentes jurisdicciones, por lo que es recomendable obtener asesoramiento legal específico según el país y las circunstancias particulares.

En términos generales existen dos tipos de poder según el coste y la forma en que se otorga.

El más conocido es el poder que se hace ante el notario, el mismo sirve para todas las instancias y puede utilizar en otros procedimientos. Su coste es mayor al de apud acta, puesto que este es gratuito y puede obtenerse por comparecencia personal en el Juzgado o por comparecencia electrónica.

A diferencia del poder notarial, el apoderamiento apud acta solo sirve para el procedimiento judicial para el que se otorgue.

Según lo que el poderdante necesite, es necesario distinguir lo que es el poder general y lo que es el poder especial.

1. General: este poder permite llevar a cabo todos los actos procesales que sean necesarios. Sin embargo, el poderdante puede eliminar las actuaciones que desee.
2. Especial: se otorga para realizar una serie de actos específicos, como: consentir, desistir, renunciar, someterse a arbitraje o expresar la voluntad de sobreseer el proceso. También se emplea para interponer una querella, ejercitar las facultades que el poderdante excluyó del poder general, entre otras establecidas por la ley.