¿Cómo se reclama un aval bancario?


¿Cómo se reclama un aval bancario?

El beneficiario de un aval bancario puede comprobar que este se ha formalizado en el registro de la entidad. Además, en determinados casos el aval debe estar a disposición del público, como ocurre con las cantidades entregadas a cuenta a promotores.

Para promover la demanda se deberá demostrar la existencia e incumplimiento de la obligación. De hecho, en los avales «a primer requerimiento» no será necesario ni siquiera demostrar este incumplimiento, bastando con reclamar el pago.

Esta facilidad de cobro y la solvencia y liquidez del banco son los elementos que explican la popularidad del aval bancario.

Para reclamar un aval bancario, generalmente se siguen los siguientes pasos:

  1. Revisar el contrato y condiciones del aval: Es importante revisar detenidamente el contrato de aval y las condiciones establecidas. Verifica los plazos, montos, conceptos y cualquier otro detalle relevante para comprender tus derechos y obligaciones, así como los procedimientos de reclamación.
  2. Comunicarse con el beneficiario: Si tienes la necesidad de reclamar el aval, debes comunicarte con el beneficiario, es decir, la persona o entidad a la que se le otorgó el aval. Notifícales de tu intención de hacer valer el aval y proporciona la documentación necesaria que respalde tu reclamación.
  3. Presentar una solicitud por escrito: Redacta una solicitud formal por escrito dirigida al banco que emitió el aval. En la solicitud, explica claramente tu reclamación, incluyendo los detalles pertinentes como los motivos por los que se activa el aval, los montos y cualquier documentación de respaldo. Asegúrate de incluir tus datos personales y de contacto.
  4. Adjuntar documentación requerida: Adjunta a tu solicitud todos los documentos relevantes que respalden tu reclamación, como el aval original, el contrato, facturas, comprobantes de incumplimiento, comunicaciones anteriores, entre otros. Es recomendable hacer copias de todos los documentos para tus registros.
  5. Enviar la solicitud: Envía la solicitud por correo certificado o mediante otro medio que permita tener un comprobante de envío. Asegúrate de guardar una copia de la solicitud y de los documentos enviados.
  6. Seguimiento y contacto con el banco: Mantén un seguimiento regular con el banco para asegurarte de que tu reclamación sea atendida. Puedes comunicarte por teléfono o por correo electrónico con el departamento o la persona encargada de gestionar los avales.

En caso de que el banco no responda a tu reclamación o no cumpla con sus obligaciones avaladas, puedes considerar buscar asesoramiento legal para explorar las opciones legales disponibles, como presentar una demanda o recurrir a la vía judicial.

Cabe destacar que estos pasos son una guía general y pueden variar dependiendo de las circunstancias particulares, el país y las leyes locales aplicables. Es recomendable buscar asesoramiento legal específico y personalizado para obtener orientación precisa según tu caso concreto.