Liquidación de una fundación
La liquidación de una fundación implica el cese de sus actividades y la distribución de sus activos de acuerdo con los objetivos y disposiciones establecidos en sus estatutos. A continuación, se describe de manera general el proceso de liquidación de una fundación:
- Verificación de los estatutos: El primer paso es revisar los estatutos de la fundación para entender las disposiciones y procedimientos específicos relacionados con su liquidación. Es importante asegurarse de que se cumplan todos los requisitos legales y estatutarios para iniciar el proceso de liquidación.
- Nombramiento de liquidadores: La fundación debe designar uno o más liquidadores responsables de gestionar el proceso de liquidación. Los liquidadores pueden ser miembros de la junta directiva de la fundación o personas designadas específicamente para este propósito.
- Cesación de actividades: La fundación debe cesar todas sus actividades, incluyendo la suspensión de nuevos proyectos, programas y operaciones. Se deben tomar las medidas necesarias para cerrar cuentas bancarias, cancelar contratos y resolver cualquier asunto pendiente.
- Inventario de activos y pasivos: Los liquidadores deben realizar un inventario detallado de los activos y pasivos de la fundación. Esto implica identificar y valorar todos los bienes, propiedades, inversiones, deudas y obligaciones de la fundación.
- Liquidación de deudas y obligaciones: Los liquidadores deben asegurarse de pagar todas las deudas y obligaciones pendientes de la fundación utilizando los activos disponibles. Esto puede incluir el pago de salarios, honorarios profesionales, proveedores y cualquier otro pasivo existente.
- Distribución de activos restantes: Una vez que se hayan liquidado todas las deudas y obligaciones, los liquidadores deben distribuir los activos restantes de acuerdo con los objetivos y disposiciones establecidos en los estatutos de la fundación. Esto puede implicar la transferencia de activos a otras organizaciones sin fines de lucro o entidades benéficas con propósitos similares.
- Cancelación legal: Una vez finalizada la distribución de los activos, se debe presentar la documentación necesaria ante las autoridades competentes para solicitar la cancelación legal y formal de la fundación.
Es importante tener en cuenta que el proceso de liquidación de una fundación puede variar según la legislación y regulaciones del país donde está establecida. Por lo tanto, es recomendable obtener asesoramiento legal y contable para asegurarse de cumplir con todos los requisitos legales y procedimientos específicos en el proceso de liquidación de la fundación.
Una vez extinguida una fundación, deberá ser liquidado el conjunto de bienes y derechos resultantes. Genéricamente, estos serán asignados a otras fundaciones, cuya designación corresponderá al Patronato bajo el control del Protectorado.
Sin embargo, las fundaciones pueden establecer el destino que tomarán sus bienes y derechos en caso de disolución en los estatutos. Esto se hace de forma previa, en el acto de su constitución.
La extinción y liquidación de las fundaciones también debe ser inscrita en el Registro de Fundaciones, lo cual le otorgará el correspondiente estado público al acto de disolución.